Por: Ing. Hugo Mateo López
Gerente de Producción
Alianza Metalúrgica
Ingeniero Metalurgista (CIP 39514)
El aluminio es soldable. El desarrollo de métodos para la soldadura del aluminio y sus aleaciones abrió un nuevo segmento de mercado en aplicaciones como: puentes, edificios, transportes (embarcaciones, trenes y automóviles), piezas fundidas en general, piezas forjadas, etc.
Antes de proceder a soldar, se recomienda remover la película de óxido de la superficie a soldar. Esto se puede realizar por vía química, mecánica, eléctrica o láser. Una vez removida, se debe prevenir nueva formación de óxido, protegiendo el metal de la atmósfera.
A pesar que la temperatura de fusión de la mayoría de las aleaciones de aluminio es menor que la mitad de la temperatura de fusión del acero, cantidades similares de calor son requeridas para llevar a los dos metales a sus puntos de fusión, debido al mayor calor específico y latente de fusión del aluminio. Como el aluminio posee mayor conductividad térmica, requiere también de mayor rapidez en el suministro de calor.
La elección del proceso de soldadura depende del espesor del material, del tipo de cordón de la soldadura, de los requisitos de calidad, apariencia y costo. Durante el proceso de soldadura, la mayoría de los métodos modernos protege el aluminio líquido con un gas inerte (argón o helio), siendo dos los procesos más conocidos y utilizados: TIG y MIG.
* Proceso de soldadura TIG (Tungsten Inert Gas): Es un proceso en el que el arco eléctrico es establecido entre un electrodo de tungsteno no consumible y una pieza, en una atmósfera de gas inerte. El proceso TIG es el más aplicado en la soldadura de las aleaciones de aluminio y fue el primero en ser desarrollado con protección de gas inerte adecuado para soldar el aluminio.
* Proceso de soldadura MIG (Metal Inert Gas): Es un proceso en el que el arco eléctrico es obtenido a través de una corriente continua. Se establece entre la pieza y un cable de aluminio o aleación de aluminio, que combina las funciones de electrodo y metal de adición, en una atmósfera de gas inerte. En el proceso MIG el electrodo es siempre un polo positivo del arco eléctrico. Utilizándose versiones automáticas y semi-automáticas, es posible soldar el aluminio desde espesores finos cercanos a 1.0 mm.
